Tlahui-Politic. No. 8, II/1999


Atentado con explosivos contra la sede del IPC

Información enviada a Mario Rojas, Director de Tlahui. Colombia, a 31 de Agosto, 1999. El Observatorio/COL 010/9908/OBS 055/Colombia/Atentado. El Observatorio para la Protección de los Defensores de los Derechos Humanos, programa conjunto de la FIDH y de la OMCT, solicita su intervención urgente en relación a la siguiente situación en Colombia.

Descripción de la situación:

El Observatorio ha sido informado del atentado con explosivos contra la sede del Instituto Popular de Capacitación (IPC) en Medellín, Colombia. De acuerdo al IPC, el día 29 agosto de 1999, a las 00: 58, personas desconocidas que se movilizaban en un vehículo automotor, realizaron un atentado con explosivos contra la sede del IPC ubicada en el barrio Prado Centro de la ciudad de Medellín, el cual no produjo víctimas, pero sí cuantiosas pérdidas materiales en la sede y en las casas vecinas.

El IPC es una reconocida ONG que realiza trabajos en los campos de la investigación, la educación y la promoción, en relación con los Derechos Humanos, el desarrollo local, la resolución de conflictos, la convivencia y la paz; la gestión pública local y las juventudes. Actualmente, la institución adelanta los preparativos para la Semana por la Paz 99. Igualmente, el IPC impulsa en Antioquia la campaña contra el secuestro y la desaparición forzada denominada " NO MAS ".

Este atentado constituye el segundo acto de violencia contra la institución en siete meses. El 28 de enero de 1999 cuatro investigadores del IPC fueron secuestrados por las Autodefensas de Córdoba y Urabá, dirigidas por Carlos Castaño, las cuales fueron dejadas en libertad después de 21 días (ver Llamados Urgentes COL 002 / 9901 / OBS 006).

En Colombia, el trabajo que realizan instituciones como el IPC es objeto de constante intimidación, persecución y ataques. A pesar de las declaraciones oficiales en el sentido de que se están tomando las medidas adecuadas para garantizar su labor, los defensores de los Derechos Humanos y las instituciones que trabajan por la Paz en Colombia se encuentran desprotegidas y permanentemente amenazadas.

El Observatorio hace un vehemente llamado a las autoridades colombianas para que garanticen de manera efectiva la integridad y la seguridad de las personas que trabajan en el IPC así como para que tomen las medidas apropiadas para que desarrollen libremente sus labores.

Ginebra - Paris, 30 de agosto de 1999

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