Un Testimonio de Preocupación y Hermandad

Información enviada a Mario Rojas, Director de Tlahui. Chile, a 26 de Noviembre, 1999. CHILE: Un Testimonio de Preocupación y Hermandad (El País/España/25-11-99), en http://www.presos.org y http://www.elpais. es/p/d/cartas/otras.htm

A continuación hacemos llegar a usted un artículo sobre los Presos Políticos, escrito por el señor Gabriel Salas, residente en Dubbo (Australia), el cual fue publicado en diario "http://www.elpais. es/p/d/cartas/otras.htm", sección cartas del 25 de noviembre, bajo el título "Presos políticos de Chile".

El País/Gabriel Salas/25-11-99

Es increíble ver cómo los señores representantes del Estado chileno levantan sus voces en defensa de los derechos humanos de un dictador asesino. La hipocresía es inaudita para los que pueden ver las cosas desde dentro de las cárceles de Chile. Porque esos señores, que hoy lloran lágrimas humanitarias para salvar de la justicia al ex-dictador, nunca se han preocupado por defender los derechos humanos de las decenas de presos políticos que se pudren en las cárceles de su propio país.

Aunque se trate de ocultar esa vergüenza nacional, en Chile todavía hay presos políticos que viven en condiciones sub-humanas. Y si usted no pudiera creerlo, por favor contacte la dirección http://www.presos.org

Verá en esa "página" una larga lista de nombres de hombres y mujeres encerrados -y torturados- a partir de marzo de 1992, vale decir después de que se inaugurara la "transición a la democracia" que esos señores protectores del dictador representan. Verá que la mayoría de esos presos políticos son jóvenes que lucharon contra la pobreza y la violencia política generadas por la dictadura, y que participaron en los movimientos sociales que ayudaron a finalizarla. Muchos son hijos de padres y parientes asesinados o desaparecidos durante la dictadura.

Verá que se encuentran en la cárcel de alta seguridad de Santiago, administrada por ex-agentes de la CNI, la siniestra organización de inteligencia de Pinochet. Verá cómo, en consecuencia, su integridad física y psíquica es continuamente amenazada por golpizas, allanamientos y segregación, y cómo viven en un clima de violencia que hace que su situación sea un insulto a los derechos humanos.

Verá también que a esos presos políticos no se les da ni el derecho básico de ser juzgados por tribunales competentes e imparciales y que se encuentran una situación de absoluta indefensión jurídica. Todos ellos tienen doble procesamiento por el mismo delito, aberración jurídica condenada en todo el mundo y conocida como "NON BIS IN IDEM". Sabrá que enfrentan una Justicia Militar omnipotente que les adjudica penas desproporcionadas, a menudo en base a declaraciones obtenidas bajo tortura. Muchos de los presos políticos de Chile ni siquiera tienen abogados. Verá, en fin, tantas otras cosas que no cabe mencionar aquí. Y vera que se necesita hacer algo pronto, porque hay gente que podría fallecer si no se le da acceso a servicios médicos adecuados.

Lo señores representantes del Estado chileno conocen bien toda esta situación. Nada han hecho porque su juego no es humanitario. Su juego es postergar hasta la eternidad cualquier cambio en la estructura del Estado heredado de la dictadura. Dar ayuda humanitaria a los presos políticos implicaría cambiar las leyes que fundamentan a ese Estado que los beneficia.

En algunos días, se medirán los vestigios de azúcar que queden en la sangre del lobo y tratarán de encontrarle un corazón arrítmico, arterias coronarias endurecidas, desviaciones de su columna vertebral u otras desviaciones. Le harán creer que es débil para así impedir que enfrente a sus enemigos como militar valiente para decirles: "Señores, aunque no les guste, yo hice matar, torturar y desaparecer a miles. Aquí está toda la verdad. Destápenla y conózcanla entera, aunque salgan sapos y culebras. Sepan que yo hice lo que hice porque pensé -y sigo pensando- que ése era mi deber. Como lobo que soy, fui entrenado para eso".

Señores políticos del Estado de Chile, la lucha por los principios humanos comienza en casa. Comienza en la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago. No en la jaula del lobo. Gabriel Salas, Dubbo (Australia)

Red de Familiares y Amigos de los Presos Políticos de Chile "Cada Día los Rescataremos del Silencio y del Castigo" www.presos.org Chile@presos.org

¡Muchas gracias!

From: Comité Internacionalista Arco Iris ale.ramon@numerica.it
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