Paramilitares asesinan varias personas en operación de "limpieza social"
Tlahui-Politic 9 I/2000. Información enviada a Mario Rojas, Director de Tlahui. Guatemala, a 20 de Mayo, 2000. Gtm - Paramilitares asesinan a varias personas en una
operación de "limpieza social".
Equipo Nizkor, miembro del Serpaj Europa, Derechos Human Rights (USA) y del GILC (Global Internet Liberty Campaign).
Información.
PARAMILITARES ASESINAN A VARIAS PERSONAS EN UN OPERACIÓN DE LIMPIEZA SOCIAL QUE
RECUERDA EL MODUS OPERANDI DE LOS ESCUADRONES DE LA MUERTE.
GUATEMALA, 18 de mayo.- La reaparición de supuestos "escuadrones de la muerte"
que en presuntos operativos de "limpieza social" ejecutan a personas, previa
tortura y tiro de gracia, sacude a la sociedad guatemalteca luego de que esta
semana fueron descubiertos cuatro cadáveres con esas huellas de tormento.
En tanto, el fiscal Leopoldo Zeissig afirmó hoy que el asesinato del obispo Juan
Gerardi, en abril de 1998, se debió a su participación en la redacción del
informe de la Recuperación de la Memoria Histórica (REMHI), que atribuye al
Ejército más de 90% de las violaciones a derechos humanos y crímenes en el
pasado conflicto armado (1960-96); en ese documento se certificaron más de 55
mil casos extremos.
Organismos de derechos humanos expresaron hoy su preocupación por la aparente
puesta en marcha de una sanguinaria operación de "limpieza social" en Guatemala,
versión que de antemano fue descartada por la Policía Nacional Civil (PNC).
En efecto, el descubrimiento, esta semana, de varios cadáveres con señales de
tortura, atados de pies y manos, tiro de gracia incluido, "hace presumir un
retorno al pasado violento", según palabras del Procurador de los Derechos
Humanos, Julio Arango.
El "ombudsman" dijo que está preocupado por las múltiples muertes
extrajudiciales y exigió al Presidente Alfonso Portillo que defina sus acciones
en materia de seguridad pública y detenga a los responsables de esos crímenes.
El Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), que reúne a familiares de 45,000 desaparecidos
políticos durante la pasada guerra civil en Guatemala, señaló en un comunicado
que el hallazgo de cuatro cadáveres con señales de tortura el pasado martes
podría ser el inicio de programas de "limpieza social" dirigidos contra las aquí
llamadas maras (pandillas) o delincuentes de bandas pequeñas.
"No dudamos de que los responsables de estas muertes sean los mismos que en el
pasado violaron los derechos humanos, sólo que ahora responden a intereses del
crimen organizado", subrayó el GAM.
También la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado (ODHA) señaló que "sería
lamentable" para el país una abrupta vuelta al pasado violento y demandó a las
autoridades que adopten medidas drásticas para controlar ese fenómeno.
El portavoz de la Misión de Verificación de las Naciones Unidas para Guatemala
(Minugua), Bertrand de la Grange, por su parte, comentó que por las
características de esos crímenes se piensa que existe una posible operación de
"limpieza social".
Pero, la Policía Nacional Civil descartó esa posibilidad y atribuyó los
asesinatos a problemas de drogas entre pandilleros.
GERARDI, AJUSTICIADO
Fue la suscripción y difusión del informe de la Recuperación de la Memoria
Histórica (REMHI) la causa del asesinato, el 26 de abril de 1998, del obispo
auxiliar Juan Gerardi, según el fiscal especial del caso, Leopoldo Zeissig,
quien añadió que, según sus investigaciones, el también llamado Informe Gerardi
hirió los intereses de los militares acusados del crimen del prelado.
Los presuntos afectados serían el coronel retirado Byron Disrael Lima Estrada,
su hijo, el capitán Byron Lima Oliva, y el ex guardaespaldas presidencial José
Obdulio Villanueva.
En aquel documento se atribuye 90 por ciento de las violaciones al Ejército y
siete por ciento a la guerrilla de la Unidad Revolucionaria Nacional
Guatemalteca (URNG).
Ahora, de acuerdo con el fiscal, el coronel Lima Estrada fue el autor
intelectual del crimen y su hijo le ayudó en la planificación y ejecución. Los
tres militares son acusados de la "ejecución extrajudicial" del obispo y están a
la espera de que hoy la juez a cargo del caso, Flor de María García, decida si
los lleva a un juicio oral.
Gerardi había revelado el REMHI 54 horas antes de su brutal asesinato. Fue
ultimado a golpes con una piedra, en la cochera de la casa parroquial de la
iglesia de San Sebastián, de la que era su párroco titular, a escasos 300 metros
de la residencia presidencial de Guatemala.
Además de los tres militares, también están detenidos por el asesinato de
Gerardi el sacerdote Mario Orantes, que era auxiliar de la víctima, y su
cocinera, Margarita López. Orantes, que está hospitalizado, fue acusado por el
fiscal especial de asesinato y López de encubrimiento propio; ambos serán
llevados a un juicio oral, según la resolución judicial.
Tanto el coronel retirado como su hijo han negado haber participado en la muerte
del obispo fundador de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado (ODHA), y
consideran que la acusación contra ellos es política y busca perjudicar a la
institución armada guatemalteca.
[Fuente: Haroldo Shetemul, corresponsal Diario Excelsior, México, 19may00]
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